Jan Frodeno, a quien no hace falta que presente, en una entrevista que realizó a una revista deportiva dijo lo siguiente: “I am made of a lifetime of training, not just victories (Estoy hecho de toda una vida de entrenamientos, no sólo de victorias)”.
Si traslado la frase a mi condición de triatleta amateur, la entiendo de la siguiente manera: la dedicación del tiempo y esfuerzo no está en los días de competición sino en los entrenamientos constantes que realizo para aspirar a competirlas.
Y es que el triatlón, por su carácter multidisciplinar y deporte “de fondo”, exige mucho entrenamiento, y esa carga de trabajo, en mi caso únicamente la consigo por tres razones: motivación por la consecución de las metas marcadas (triatlones planificados), apoyo de las personas que me rodean, y fuerza de voluntad.
Analizándola por partes, la motivación en el deporte, en mi caso, está asociada al reto propuesto. Cuanto más alto es el reto mayor motivación me produce por regla general, pero no penséis que peco de osadía, los retos me los propongo en función de una planificación a largo plazo que no me penalice el tiempo que quiero dedicarle al resto de mis compromisos (familia, amigos, trabajo y resto de hobbies). La dedicación en tiempo depende del objetivo, a mayor distancia, mayor suele ser la carga de trabajo necesaria, ya que has de acostumbrarte a aguantarla.
Por tanto, llevo varios años planificándome anualmente varios triatlones olímpicos y uno de media distancia, con el fin de, a medida que vaya encontrándome con mayor capacidad, ir aumentando los km al año en competición. Un Triatleta amateur con pasión por esta competición.
La conciliación de los entrenamientos con la familia y amigos es fundamental, hay que descansar, y los momentos de descanso hay que aprovecharlos con tu gente querida. Pero no sólo eso, esta gente que tanto quieres ha de aceptar y apoyarte en tu decisión de dedicarle el tiempo que le necesitas a esta ilusión, porque sin su apoyo vas a desinflarte enseguida.
Por último, y en relación con la fuerza de voluntad no va a hacer falta que me explaye. La fuerza de voluntad únicamente puede salir de uno mismo, y nace si de verdad quieres conseguir algo. Punto.
Me he divertido escribiendo un poco en este blog, espero que en un futuro pueda alimentarse de vivencias u ocurrencias vuestras. Un abrazo.